El mal tiempo del viernes y la suspensión de la jornada en Vialidad no impidió que Pucho Loco y Cavalino se pusieran al día con el torneo. En el predio de Municipales se jugó este partido caliente y trascendental para la tabla de posiciones. Así lo entendieron ambos equipos y salieron a ganar, cada uno con sus armas. Cavalino, tomando la iniciativa desde la juventud de su plantel. Pucho Loco, más cómodo con el contragolpe, aguantando en el fondo con la experiencia de sus 18 años juntos. Salió un partido vibrante, jugado con intensidad y con algunos (pocos) pasajes de buen futbol.
Cavalino, gracias al despliegue de su nro 5, Lucio Oca y con el talento y potencia de Martín Gonzalez, tuvo la posesión del balón. Le faltó claridad en los metros finales. Un par de remates de larga distancia fueron lo más peligroso. Pucho respondía con la firmeza de su línea de fondo y el ingenio para resolver y crear peligro de sus dos atacantes, Gruttulini y Martino.
El primer tiempo no tuvo goles pero sí un ritmo intenso. Los gritos llegaron en el complemento. A los 10, Gabriel Martino abrió el marcador para Pucho. La hizo completa. Guapeó por derecha y se la ganó a su marcador. Se sacó de encima a un defensor enganchando hacia el centro y definió fuerte de zurda. El grito se escuchó hasta la Richieri. Cavalino, herido en su amor propio, lo fue a empatar… y lo encontró. Luego de un par de intentos donde se lo exigió al arquero Gustavo García, Martín Gonzalez conectó de cabeza tras un corner y la puso al segundo palo. Golazo. Era justicia. Cavalino no merecía perder. Pero esto es futbol y, a veces, la justicia se hace a un lado. Una subida por derecha trajo un centro al área. Alguien no llegó a rechazar y la bocha le quedó servida al capitán Fernando Gruttulini. Este definió fuerte y la clavó, desatando el delirio de los blanquiazules.
Cavalino acusó el golpe y pero ya no hubo ni fuerzas ni tiempo para empatarlo. Entretenido partido entre dos buenos equipos. El festejo y la punta se quedaron para Pucho Loco. Ahora habrá que sostenerlo en las tres finales restantes.
Encuentro