UNA CUESTION DE ACTITUD. Siempre quizo más. Fue al
frente y lo ganó. Cavalino FC es el nuevo Campeón de Torneos
del Bajo, turno mañana. En un desarrollo clásico de partido
definitorio, con mucho nervio y poco futbol, el equipo negro
con rayas (esta vez de amarillo) fue superior a su rival.
Sorprendió Sin Pupilas con su actitud apichonada. Como si la
presencia de los dos tanques de Cavalino (Imbesi y Gonzalez)
hubieran amedrentado al equipo capitaneado por Pablo Di
Mascio.
El primer tiempo se fue sin pena ni gloria. Alguna escapada
aislada del goleador Esteban Imbesi por izquierda. Alguna
respuesta del zurdo Aljandro Pacin. Muy poco para una final,
donde Cavalino siempre tuvo la iniciativa.
Llegó el minuto 8 de la segunda etapa. Momento bisagra del
partido. La zaga central de Sin Pupilas, que hasta el momento
había contenido bien a la pesada de Cavalino, tuvo su instante
fatal. Al estilo Demichelis contra Bolivia, no supieron resolver
qué hacer con la pelota en la zona que quema. Justo
merodeaba Esteba Imbesi, una animal del área. El goleador
del torneo no tuvo piedad ante la duda. Media vuelta y
bombazo arriba. Uno a cero. Sin pupilas reaccionó
instintivamente. El resultado lo obligaba a salir y tomar
riesgos. Lo pudo haber empatado con un cabezazo que pegó
en el palo, pero las cartas estaban echadas. Los azules no
tuvieron los recursos como para acercarse de manera clara y
asociada. Así el partido quedó servido para la contra de
Cavalino. El tridente Gil, Gonzalez e Imbesi encontró los
espacios para florearse un poco. Así llegó el tanto definitivo,
con una escapada de Martín Gonzalez por derecha y un remate
fuerte que rechazó el arquero al medio. El rebote lo tomó el
recién ingresado Nicolás Pizarro y la empujó. Dos a cero y
delirio para Cavalino.
Solo quedó tiempo para alguna bronca aislada de Sin Pupilas,
producto de la impotencia del final. Se destaca la limpieza de
ambos equipos, no sólo en la final, sino también a lo largo de
todo el torneo. Un Campeón justo. Quiso más, hizo más y lo
ganó.