20 años
Hay un momento en que la cabeza, gracias a la madurez de los años, a uno le hace click y las cosas se ven de otro modo. La gente se acerca a los torneos amateur por ese placer de jugar con amigos, de competir para ganar y para cumplir ese sueño de pibe mirando a su ídolo en revistas (lo más viejos) o en TV. Si las cosas van bien, ese grupo de amigos perdura en el tiempo y el futbol del fin de semana se convierte en un ritual más amplio. El partido de futbol pasa a ser una excusa para juntarse, contarse cómo fue la semana, reírse de esas pavadas que sólo los amigos entendemos. Y si ese grupo de amigos es de fierro, entonces aparecen los hijos correteando, dando vueltas y acompañado al viejo a compartir ese momento único. Muchos equipos de TDB se ven reflejados en estas palabras, pero hay uno que las sintetiza como ninguno: Pucho Loco. Presentes en nuestro torneo desde 2011, pero juntos desde hace veinte años. Los muchachos del sur del conurbano renuevan sábado a sábado el ritual sagrado de futbol y asado con amigos. El último fin de semana festejaron el cumpleaños de Javier Trapani con triunfo sobre la hora frente a Athenas. Salud Pucho!
Categoría A / Turno Mañana / Clausura 2012
PUCHO LOCO CAMPEÓN
Clima de final y no decepcionaron. Leo Abrigate le jugó un partidazo a Pucho pero no le alcanzó. El equipo de Avellaneda se sobrepuso una vez más a la adversidad y sacando fuerzas de su rica historia lo dio vuelta. Lo ganó y se llevó el título del Apertura. El primero para ellos en Torneos del Bajo.
Los de blanco y celeste comenzaron dominando claramente a su rival. Con mucha dinámica, toque y salida clara desde el fondo, sobre todo desde el buen pie de Ricky Gainza por izquierda, tuvieron la iniciativa los primeros minutos. También por la punta izquierda, el espigado Javier Drago hacía la diferencia. Por esta vía llegó la apertura del marcador. Una corrida del zurdo, desborde, centro atrás y gol de Christian Perez. Puntazo rápido al primer palo que dejó sin reacción al arquero. Pucho tuvo que salir de su esquema y se vió obligado a buscar el resultado. En la cancha de al lado La Esquina ya le ganaba a Bucaramanga, lo que aumentaba la cuota de dramatismo. Es en esos momentos adversos cuando los equipos demuestran si están o no para grandes cosas. Pucho entendió que debía reaccionar y lo hizo. El empate llegó en la jugada más polémica de la jornada. Un bombazo de Fernando Gruttulini pegó en el travesaño picó y salió. El línea, bien ubicado, corrió al centro señalando el gol. Así el partido se fue al descanso con el empate. Los resultados forzaban una eventual final para definir el torneo.
En el complemento los dos equipos siguieron buscando el resultado. El calor y los nervios entraron en escena. Pucho puso sangre joven en la cancha para tener más oxígeno y piernas. La entrada de Matías Camaño fue clave, ya que el nro 11 capturó un rebote luego de un centro, se filtró en el área y solito frente al arquero definió suave contra un palo para el dos a uno. Leo Abrigate lo salió a buscar y dejó huecos en el fondo. Federico Castaño bancó todo en la defensa, haciendo los relevos de sus compañeros que se iban a buscar el empate, barriendo y cerrando ambas puntas. El partido se puso caliente.
Un párrafo aparte para Gabriel Martino, el mellizo Barros Schellotto de Torneos del Bajo. El delantero fue pieza clave de este logro, y en especial en el último partido. Dueño de una rara habilidad y un carácter muy difícil de domesticar, Martino se las ingenia para pelearlas todas, con el cuerpo, con mañas, con habilidad. A él le hicieron el foul que derivó en el empate. Él desbordó por derecha para meter el centro para el segundo gol. Y él clavó el tercero, recibiendo abierto por izquierda, enganchando hacia adentro y clavándola fuerte al primer palo. Un demonio al servicio del equipo.
Quedaron para el final un par de guapeadas de Gastón Capocasale, robando y llegando al fondo por la punta derecha y el penal atajado por Gustavo García, que le hubiese puesto un poco más de sufrimiento al resultado final.
Un torneo apasionante que se definió en la última fecha. Bien para Leo Abrigate, de gran torneo, logrando un digno tercer puesto y teniendo al goleador, Cristian Perez. Muy bien por La Esquina, que peleó hasta el final y estuvo a un paso de forzar un desempate. Mejor para Pucho Loco, merecido Campeón del Clausura.
Clausura 2011
DURO DE VENCER
Pucho Loco, uno de los equipos con mejor predisposición y buena onda del torneo, tuvo también su pequeño premio. La valla defendida por Gustavo García fue la menos vencida del torneo. Abonados al eterno tercer tiempo, el equipo azul de los quince años tuvo su motivo para festejar.
